La lucha tradicional senegalesa es el deporte nacional de Senegal, por encima del fútbol. Sus reglas permiten golpear con las manos, sin guantes. De gran arraigo en la cultura popular, combina técnicas ancestrales con el entrenamiento en el gimnasio. Auténticos colosos de ébano, los luchadores aspiran al título de “Rey de las Arenas” y son un modelo de éxito. Si antiguamente el premio era una parte de la cosecha, hoy el ganador puede embolsarse hasta medio millón de euros por combate. La mayoría confía en los conjuros de su hechicero particular para alcanzar la victoria.
Este reportaje fue galardonado con el Sony World Photography Award 2020 (ver aquí)